EL CASO DEL INGENIERO FARMACÉUTICO

La burocracia es un invento del hombre que apareció casi a la par que el primer documento escrito.Con lo cual podemos decir que esta "amiga" lleva acompañándonos desde los albores de la historia antigua.Aunque claro,como todo en esta vida, en sus orígenes era más sencilla:Registros, cuentas,documentación... Parecía lógico que para llevar una buena organización, la sociedad necesitaba de alguna regla que impusiera un cierto orden en los asuntos de mayor importancia, y al ser posible que fuera de lo más standard.

Pero con la evolución de la sociedad, también evolucionaron los problemas y con ellos la maldita burocracia.Algo que a primera vista parecia inofensivo y en cierto modo necesario, llegó a convertirse en un pesado lastre cuya especialidad es sacar de quicio a los pobres ciudadanos que tienen que hacer cualquier gestión.

Eso sí, nuestra amiga cuenta con una serie de colaboradores que la ayuden a cumplir con su misión:Los funcionarios.

Los funcionarios gozan de inmunidad, y plena libertad para realizar su labor según su criterio, marcando ellos el ritmo, que normalmente es excesivamente lento, y haciendo de su trabajo un martirio para el que está al otro lado de la ventanilla.Digo que son inmunes porque una vez que ingresan en filas ya tienen un puesto asegurado de por vida, porque si la administración es muy mala pagando en promoción de obra pública, cuando se trata de sus niños tiene sencillamente las manos atadas.Eso sí, para disfrutar de todos estos privilegios los aspirantes a funcionario deben pasar una dura prueba conocida como OPOSICIÓN.

Una Oposición es como una Olimpiada, sólo que en ésta el tener acceso al podium significa tener el sustento asegurado.Se trata de una competición directa en la que las plazas se encuentran muy por debajo de las solicitudes.Pero una vez que han conseguido su premio nadie se lo puede arrebatar.

Tal vez sea por lo mal que lo han pasado, o la seguridad que origina saberse empleado de por vida, que la actitud del funcionario para con el público se resiente hasta el punto de volverse déspotas y pasotas.Si queréis movimiento, desde luego no lo encontraréis en una ventanilla: Que si me voy para este escritorio, que si ahora p'acá, que si a la fotocopiadora, que si jiji-jaja con la compañera de turno, que si te falta tal impreso y luego, paramos para la hora de desayunar.Os digo que a más de una la ponía yo de cajera para que espabilara y aprendiera a menear el asunto.

Esta actitud puede esasperar a más de una persona, pero si encima estamos hablando del paro de una persona, entonces la cosa se pone más seria porque ya estamos hablando de necesidades y sentimientos.Os puedo asegurar que a este gente " se la suda".Está bien distanciarse, pero es que no les corre sangre por la venas.Las funcionarias del INEM son frías como el hielo, bueno no todas, pero algunas sí.

Y os diré porqué contándoos como siempre mi experiencia personal:

Como os sonará iba a la carrera desde la otra punta de Madrid para llegar a tiempo a la oficina del INEM que corresponde a mi zona y solicitar una documentación imprescindible para apuntarme a un master a distancia.

La documentación en cuestión era un certificado de periodo, que daba fé de estar en paro en la fecha indicada.Cuando llegué pregunté qué tecla tenía que pulsar porque veréis:

La oficina está dividida en varias mesas con un letrero digital encima de cada una.Las diferentes funcionarias resuelven las gestiones de la gente por turno.Para coger turno hay que acercarse a una maquinita situada al principio con una serie de teclas, cada una con una letra.En función de la naturaleza de la gestión se elige en consecuencia, por ejemplo, R para renovar; y así te quedas con un ticket donde aparece tu número, y a esperar.

Tuve suerte porque la misma mujer que me indicó que tenía que pulsar R me atendió al momento.De hecho fue pulsar y apareció el número en su letrero: R59.

En 5 minutos me expidió el certificado sin necesidad de presentar nada salvo el dni.Guay, me había dado tiempo, pero espera, la fecha reza que estoy parado desde el 17 de marzo."No puede ser, si me apunte al INEM a primeros de febrero".

Me di la vuelta y pregunté a qué se debía esa anomalía.Sabía que no podía haber sido lo de la agencia porque la última figuración la hice antes y no coincidía con el día.La mujer consultó y me dijo que lo mismo había estado unos días antes para cambiar mi demanda de empleo, de la modalidad formación a la modalidad "busco empleo".

"No, yo no me he pasado antes por aquí, y mucho menos cambiado nada", esa fue mi sincera respuesta.Pero atención a lo que me contestó la mujer "No, aquí me figura que estas buscando empleo, además que lo especifica aquí, farmaceútico"."¿Cómo que farmacéutico? Lo de farmaceútico fue un curro de verano pero de eso hace 5 años", "pues aquí me figura que estás buscando empleo como farmaceútico".

La cara que se me quedó fue de gilipollas, hablando llanamente."Si yo soy ingeniero, por favor!", "bueno esto es a causa de no haber actualizado datos desde entonces", "ya pero yo vine aquí en febrero y dije lo que hacía"; "bueno pues pasa aquí con mi compañera y te actualiza los datos aunque para cursos no necesitas corregirlo", ya, pero no puedo ir por la vida con el cartel de farmacéutico, "ah, y no te olvides de coger un ticket de la máquina".

Encima eso, a esperar.Lo que podía haber sido una gestión de 5 minutos sirvió para destapar la chapuza monumental que habían hecho con mi expediente.Normal que no me llamaran de ningún sitio, y ahí estaba, esperando más cabreao que cualquier cosa.

Después de 10 minutos eternos, el letrero de la mesa 6 se iluminó con mi número y fui a sentarme."Buenas", y le conté mi historia.La funcionaria se quedó agilipollada (es que la sensación era contagiosa) y se repuso del impacto inicial cuando le aclaré que trabajar en una farmacía, sí, había trabajado, como boticario,al menos no era tan absurdo que figurara eso en la base de datos.Le aclaré mi situación actual, y me ayudó a actualizar los datos.Gracias a su asesoria me puse en la modalidad de buscar empleo y formación, porque debido a un mal asesoramiento de la funcionaria que me atendió en febrero sólo estaba busacando formación, y era una tontería estar buscando empleo por otro lado y por aquí no.

Al final estuve 40 minutos, que visto lo visto fueron bien invertidos.En lo que pensaba al salir era en que si no hubiera sido por la casualidad de enterarme del master y solicitar la consiguiente documentación al INEM hubiera seguido ignorante a la tremenda confusión que habían cometido.

Pero hay algo más que debo aclararos:Resultó que no estaba buscando trabajo como farmaceútico, me lo aclaró la segunda chica que me atendió.En mis datos figuraba que había trabajado (pasado) como farmacéutico, pero nada más.Por lo visto la primera se había hecho la picha un lío y ante la confusión la segunda me sacó una demanda de empleo nueva prescribiéndome que al llegar a casa hiciera añicos la otra, que a partir de ese momento quedaba inservible.

Lo bueno de la movida, es que la copia impresa le salía en su impresora a la funcionaria que se confundió inicialmente , y al ver el fiasco y la metedura de pata que había cometido me dio la copia rápidamente, y mientras le contaba que había aprovechado para corregir todo me despachó diciéndome "¡pues muy bien!", y fuera.

Encima de la falsa alarma que había causado, se deshace de mí la muy asquerosa, con esas maneras, si es que ponen delante del público a cualquiera, y sé que la gente puede ser muy asquerosa porque en mis anteriores empleos he estado de cara al público pero eso no quita pasa saber aguantar los errores propios no?

El caso es que resolví ese tema y por la tarde eché la carta al buzón, la pena es que no pude hacerlo antes de la hora de recogida pero bueno hice lo humanamente posible.

Al día siguiente, viernes por fin, mientras estaba con dos de mis amigos dando una vuelta por el centro, suena mi móvil:Mi hermano.

"Alberto ¿quieres venirte el domingo a grabar un anuncio? sería por la tarde de 4 a 10, lo único que hay que llevar ropa de abrigo.O sea que te apuntas, bien pues vamos juntos".

Ya sé que dije que no me volvía, y de hecho apetecer no me apetecía, pero era dinero en metálico y acompañaba a mi hermano, total para echar la tarde de un domingo otro prefiero estar ganando pelas.

Yel famoso domingo llegó.Mi brother y yo acudimos al punto de encuentro, y allí nos enteramos de que nos íbamos para la sierra.¡Con razón la ropa de abrigo!, pero ¿ qué anuncio vamos a grabar en la sierra?, y... "¡no puede ser, oh, oh, David tenemos un problema, me he dejado el dni en casa, lo mismo me quedo en tierra, que fatalidad!"