miércoles, 29 de abril de 2009

"SE NECESITA INGENIERO CABRONCETE"

Dicen que en esta vida el que no llora, no mama.Lo que este castizo dicho viene a decir en definitiva es que a veces, no es el más preparado, sino el que más se hace oir, el que tiene más éxito.


¿Y por qué no? La verdad es que ya está bien de tanta falsa modestia; es como el del chiste en el que hay dos personas y dos trozos de pastel, uno notablemente más grande que el otro.Uno de los comensales anima al otro a coger un trozo.Éste, ni corto ni perezoso coge el cacho mayor, a lo que el otro pone mala cara, y al darse cuenta de esto le pregunta a su compañero qué habría hecho él en caso de haber elegido primero. "Hombre, por educación yo habría cogido el trozo pequeño", contesta, a lo que el otro le dice "¿pues entonces de qué te quejas? ahí lo tienes".

A veces hay que ser así, hay que echarle cara a las cosas porque si no serán otros los que hagan lo mismo contigo, y aquí el que no corre vuela.Ya está bien de ser comedidos, antes de que me alcancen, ataco.

Así que un dia decidí poner en práctica esta nueva filosofía de vida: Después de casi tres meses valdíos buscando ofertas de trabajo a través de Internet sin resultado aparente decidí que ya iba siendo hora de coger el toro por los cuernos, ó en este caso, a las empresas y empezar a probar con un ataque, perdón, quiero decir un contacto más directo; no bastaba con dejar mis datos en la red, fuera intermediarios! se hacía necesario llamar por teléfono.

Pero claro la cosa no iba a ser tan fácil, ojalá fuera como en un anuncio que ha estado emitiendo hace poco Telefónica: En él, un marido llama a su esposa para decirle que se ha quedado en paro (típico para la época que vivimos), su mujer le dice que no se preocupe.Al colgar el teléfono se pone a llamar a sus contactos, la amiga que tiene un marido que conoce a no sé quién en una empresa, y así la cadena poco a poco llega a donde tiene que llegar, al responsable de recursos humanos y con curriculum incluido, que ideal!

El anuncio termina cuando llaman a casa del parado y la mujer le dice "Cógelo, a lo mejor es para ti". Le dan la buena noticia, y en fundido aparecen una letras y una voz en off diciendo "Teléfonica te acerca a los tuyos en estos tiempos más que nunca".Ea, ahi es nada.

En mi caso era mucho pedir que las cosas se sucedieran así.Para empezar en Internet no ponen números de teléfono, las empresas dejan su dirección de correo pero ya está.Los teléfonos que aparecen son de contacto, no de recursos humanos, asi que tenía que buscar por otro lado.

Por eso aproveché una de las visitas a mis compis en la escuela de Ingenieros y eché un vistazo en el tablón de la bolsa de empleo.Vislumbré algunos anuncios interesantes y móvil en mano, apunté los telefónos que me interesaron, dejando a un lado las direcciones de correo.

A la mañana siguiente me puse manos a la obra: Primera llamada.

Da señal, me lo cogen: "Buenos días, llamaba por la oferta de empleo en la escuela de ingenieros de obras publicas,la persona de contacto que reza en el anuncio se llama Cristina".

"Lo siento Cristina ya no trabaja aquí, y la persona que la susituye está de vacaciones, vuelva a llamar la semana que viene". Planchazo, claro, claro, la semana que viene, en fin, puerta número dos.

Se me olviodaba decir que esta oferta era para recién titulados en una empresa constructora, pero nada, que se le iba a hacer.La segunda opción consistía en un puesto para trabajar en el mercado eléctrico, más ó menos, a ver si tenía algo más de suerte...

Primer toque, nada.Segundo toque, nada.Y así un tercero, hasta que saltó el fax.El pitido se metió hasta en la sien.

Vaya, vaya, la cosa no mejoraba.Me quedaba un único número de teléfono, la empresa Jesgar.Dedicada al sector de la jadrinería reuqerían las labores de un ingeniero de obras públicas para dirección y gestión de parques públicos.

Me lo cogieron al momento y me pasaron con la persona de contacto.Le hablé un poco de mí pero me dijo de ir al día siguiente a dejar mi curriculum en persona.De acuerdo entonces.

Al día siguiente emprendí la marcha, y digo bien porque la empresa estaba un poco a tomar por ... donde amargan los pepinos, por decir algo.El caso es que por fin llegué a la oficina.Que por cierto, me pasó lo mismo que la otra vez que no consulté el callejero, di un rodeo tontísimo hasta que di con el lugar, ¿por que no señalizarán bien las calles, por el amor de dios?¿tanto cuesta?

La oficina estaba integrada en un edificio que concentraba sucursales de varias empresas.Al llegar delante de la entrada me pareció estar delante de una sucursal de TECNOCASA.Tras llamar al timbre, transucurridos unos instantes, y después de un rato (que sólo les faltó preguntarme santo y seña) me invitaron a pasar.

Eran unas instalaciones pequeñas,de hecho no pasé del hall.En él había un escritorio donde me atendió la persona con la que había hablado por teléfono.

Era una muchacha joven, treinta y pocos, con aires muy amables, se llamaba Gema.Le di mi curriculum y me contó la propuesta:

"Verás, somos una empresa dedicada a la jardinería pero vamos a ampliar nuestra actividad de negocio cogiendo obras del ayuntamiento de Madrid, y necesitamos a un ingeniero que supervise estas obras".

Bueno, la verdad es que en principio mi perfil no parecía el más idóneo para el puesto pero lo mejor estaba por llegar:

"Eso sí, nos han dicho que se necesita una persona que sea muy puntillosa con la gente, llamémoslo así". Osea cabroncete, pensé.

"Hay que estar encima de todo el mundo y no relajarse ni un momento, así nos lo han especificado.Vamos, un poco cabrón". Esta muchacha me leia el pensamiento por momentos, jeje.

"Bueno, pues si hay que ser cabrón se es cabrón y ya está", aunque la verdad no me apasionaba bastante ese papel.Porque luego después pasa lo que pasa, que te mandan recuerdos para tu familia aunque no estemos en navidad.Por otro lado, mi perfil no es precisamente la de una pesona hija de su querida madre.

Aunque sí es cierto que soy muy perfeccionista, por ese lado si podría entrarle al tema de ser un odioso jefe de obra, pero claro, con esas indicaciones, yo no sé qué clase de puesto ofertaban:Por que una cosa es que tú mismo vayas con la idea de regañar a quien tengas que hacerlo para que no te regañen a ti, y otra muy distinta que desde el principio te digan eso.

Además que como recién titulado, no encajaba muy bien en el puesto.Aún así, ahí quedó mi curriculum, por si acaso.

Un apretón de manos puso fin a la entrevista, por tra parte muy corta, porque además la interlocutora no supo explicarme cuáles serían mis funciones porque sencillamente no lo sabía.Genial, una inútil más enchufada al grupo laboral activo.

No me llamaron, ni falta que hacía, porque en esos días otras ideas empezaban a llenar mi cabeza:Apuntarme a la escuela de idiomas y hacer una segunda especialidad, y sabeís qué? Decidí que sí.Eché los papeles para hacer la preinscripión, pero mi gozo en un pozo, sólo hay dos turnos de tarde, de 16:00 a 18:00, y de 18:00 a 20:00.

Se me solapa con los horarios de la universidad,aunque el turno de 16:00 a 18:00 los lunes y miercoles sólo me haría perder dos horas nada más en la uni, pero claro, a ver quién compagina un trabajo con ese horario, umm que lío, ¿qué hacer, y por dónde tirar?

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