viernes, 13 de abril de 2012

viernes, 30 de marzo de 2012

miércoles, 3 de junio de 2009

EL PRINCIPIO DEL FIN

En el día de hoy me gustaría contaros una historia. Una historia en la cual me voy a apoyar para haceros partícipes de una noticia que ya es un secreto a voces en mi entorno. Listos? Pues vamos allá:


Ocurrió hace años, que un bachiller recién titulado ingresó en una universidad de la capital.Como cualquier primerizo, iba con l ilusión por comenzar sus estudios y terminar lo antes posible la carrera para salir a trabajar.Aunque no le iba la vida en hacer amistades, ya que tenía su vida fuera, se mostró sociable y agradable con todo el mundo, y agradecía los gestos amables que tuvieran con él.

Y así, hablando con todos un poco, y conociendo más y más compañeros, fue como por casualidad conoció a otro compañero muy especial. A través de un amigo en común empezaron a hablar en clase de química, y el recién conocido al ver como se desenvolvía el muchacho con la asignatura le regaló un cumplido diciéndole que "era un hacha".

El cumplido fue bien acogido por nuestro prota, y a raiz de ese primer contacto, los dos muchachos comenzaron a hablar entre las clases, y se hicieron parte de la misma pandilla, la cual estaba integrada por todos los recién llegados a la universidad ese año.

Aunque también tenían muy buena amistad con los demás, la confianza entre ellos fue creciendo con el paso de los días, y eso que a priori nuestro prota se hizo una idea equivocada de su compi creyendo que era el típico niñato que iba a pasar el rato a la univerisdad, debido a que le echaron un día de clase de álgebra. Al hablar con él se enteró de que no fue su culpa, sino la de sus compañeras de al lado.

El caso es que fuera como fuere, con cada conversación se iban conociendo más, y al final, decidieron hacer equipo... sin saberlo. Todo fue espontáneo, no hubo falta acordar ni decir nada, no había un pacto tácito entre ellos, sencillamente empezaron a preocuparse por los asuntos académicos del otro, bien fuera apuntes, ejercicios, compartían información, si se enteraban de algo útil corrían a decírselo al otro por si le era de ayuda... la camaradería surgió sola.

Con el transcurso de los días,y el contacto continuo, llegó un punto en que las conversaciones no se reducían a lo meramente profesional, sino también a temas más alla de los muros de la universidad.Empezaron a tomar el café en los descansos, y las bromas y comentarios aparecían con fluidez porque su interlocutor les trasnmitía cercanía.

Comparando la trayectoria de cada uno, no se parecían en nada: Mientras que nuestro prota había sido de siempre un chico bien, estudioso, responsable, juicioso, sin excerderse en sus actos, y no con muchas vivencias desatadas en su haber, a la contra su camarada había sido en su más tierna adolescencia un "cabra" por decirlo así, con sus corredurías en el pueblo, y en tema estudios, más o menos.

Tal vez en otras circunstancias y en otro tiempo estos dos muchachos no se hubieran tratado, pero estaban en ese momento y en ese lugar compartiendo un mismo objetivo: Aprobar.

Mientras que uno estaba motivado por las ganas de prosperar, el otro se movia por el impulso de salir cuanto antes a trabajar, que era lo que más le gustaba.

Las semanas volaron en el calendario y llegaron los temidos examenes de febrero. Para nuestro chico, las cosas fueron bastante bien, no así para su camarada, que no cumplió sus expectativas.

Entonces ocurrió algo: Al camarada le cambió el humor y estuvo unos días distinto a como había estado siempre.Nuestro prota no sabía cómo reaccionar ante esa situación, porque por un lado le comprendía pero por otro se sentía impotente al pensar que no tenía culpa de nada, y no le gustaba estar en ese plan con alguien con el que siempre había estado bien.

A los pocos días, su camarada recuperó el humor habitual pero hubo un antes y un después de eso.

Aun con todo, la estrecha relación de los dos muchachos dio paso a una amistad.Empezaron a coincidir con los de su pandilla fuera de la uni, a celebrar cumpleaños, esas cosas...

Las muestras de camaredería y ayuda se siguieron dando entre los dos amigos, con mayor razón. Y los favores que se hacían sobrepasaron las típicas cosas que se hacen entre compañeros de aula, no, estos eran verdaderos favores, de los de verdad.

La gente se dio cuenta de esto, y pudo ver muestras de verdadera amistad hasta el punto de que si uno de los dos no aprobaba un examen, el otro en vez de celebrar su aprobado, se sentía mal por el suspenso.Teniendo una relación tan especial delante de sus narices, no era de extrañar que hubiera quién los "envidiara" (sanamente claro) por aquello que tenían y en más de una ocasión no faltó quien les dijera que ojalá tuvieran a alguien asi.

Gracias a esto, la carrera se hizo mucho más llevadera, porque además, los dos pasaron a curso por año, y el resto de compis se quedaron rezagados en cursos anteriores.Tenían con quien hablar, y sobre todo alguien que entendía por lo que estaban pasando, y ese fin común de sacar la carrera no hizo sino unirlos.

Sin embargo, no todo fue armonía y entendimiento. Y el dia a día, la convivencia, tiene sus roces.Durante los años que siguieron tuvieron riñas a la hora de trabajar juntos, porque cada uno tenía su propia visión de como hacer las cosas, y no querían ceder.El entendimiento no supo aflorar siempre entre ellos.

Y el último año de carrera, por circunstancias de trabajo, y quien sabe, también por probar qué pasaba, nuestro prota se cambió a un turno distinto al de su amigo, y ese curso no compartieron pupitre.

La pérdida de contacto hizo que se distanciaran, pero mantenían la amistad claro.Lo que pasaba es que nuestro compi a veces no comprendía la forma de proceder de su amigo, y en algunos aspectos no concordaba con él.Cuando no estuvo de acuerdo con su proceder en algo que él consideraba importante, se distanció más y siguió una época sin apenas noticias, sin apenas contacto.

Motivado por el extress del ritmo ajetreado de vida de nuestro chico, los acontecimientos se precipitaron y hubo un choque entre ellos.Pasado un tiempo y recuperada la calma, nuestro prota rectificó y dio ánimo de buena fe por seguir igual que siempre con su amigo.

Recuperaron el contacto, como si no hubiera pasado nada, pero hicieron borrón y cuenta nueva, y el pasado quedó atrás.

Aprendieron una lección muy valiosa con todo eso, y su amistad salió fortalecida, como las grandes amistades que duran toda la vida. Ante todo importaba esa amistad,no merecía la pena mosquearse por otras cosas, la vida son dos días...

Pasó el tiempo, y el verse alejados de las presiones de examenes y demás sobrecargas, fuera de la universidad comenzaron una nueva etapa.Como ya no se veían diariamente, cuando quedaban se ponían al dia de las novedades, trabajo, etc.

El amigo de nuestro prota estaba trabajando en una empresa extranjera, y le contaba muchas cosas acerca de su trabajo, se le veía contento.

Nuestro prota se alegraba sinceramente por él y además tenía muy buen concepto de él como trabajador, le veía un chaval muy capaz y con la capacidad de hacer lo que se propusiera.Durante los años que compartieron carrera pudo aprender a valorar todo lo que sabía hacer, que era mucho y actitud emprendedora, algo con lo que a veces no contaba.

Además estaba viviendo tiempos difíciles, al igual que muchos compañeros de su colectivo.Y los momentos de crisis y de malestar se sucedieron a lo largo de varios meses, porque ante la incertidumbre era lo único que le quedaba.

Hasta que un día, recibió un mensaje de su amigo, ofreciéndole una sálida a su situación.No era nada seguro, pero por algo se empezaba y tenía muchas posibilidades de resultar.Haciendo caso a su amigo, nuestro compi llamó inmediatamente y puso en marcha esa empresa.

Después de semanas esperando, cumpliendo con su palabra, nuestro prota levantó el auricular del teléfono para llamar a su amigo y comunicarle que gracias a él había encontrado un trabajo.

Me imagino que no hace falta que os diga que el protagonista de esta historia soy yo, pues desde el principio se veía claramente... pero sí, esta historia que os he relatado es la historia de una preciosa y bonita amistad que dura ya muchos años, y los que le quedan.Además que la intensidad y la cercanía con la que la he vivido no se puede medir en el número de años que tiene, porque he pasado tanto tiempo con este amigo y he compartido tantas vivencias que me pareciera que le conozco de toda una vida.

Y aparte de todo los buenos momentos, y todo lo que esta amistad me ha aportado, como si no fuera suficiente, me ha proporcionado la oportunidad de trabajar de nuevo como ingeniero, y en una importante empresa del sector. ¿Cómo no voy a estar agradecido a esta persona?

Este gesto no hace sino consolidar la profunda admiración y el cariño que profeso a este AMIGO mío, con mayúsculas.Le estaré eternamente agradecido, independientemente de como me vaya, pero él con ese gesto me proporcionó un rayo de esperanza entre la densa neblina de estos meses anteriores en los que la incertidumbre, y el no saber que hacer en un futuro próximo dominaban mi día a día.

Pues sí, gente, sí, después de cuatro largos meses, he encontrado un resquicio para colarme en el mrecado laboral.Podré seguir ganando experiencia como técnico y comenzar a desarrollar mi carrera.

Pero claro, esto también tiene su contrapunto: Este amigo se ha cargado al INGENIERO EN PARO, al cual le quedan muy pocos días de vida.Quien sabe, puede volver, la vida da muchas vueltas y el mercado laboral es muy inestable, pero de momento, se va.

¿Quien me iba a decir que tendría seguidores? Porque sin yo saberlo, cuento con más lectores de los que creía.Esta claro que son unos pocos nada mas, pero ya son más que cero, jeje, y para mí es un placer que me dediqueis un poco de vuestro tiempo en pasaros por aquí.

Antes de terminar, quisiera tener un último gesto:

Para ti , AMIGO MIO, va dedicado este blog, porque gracias a tu ayuda y confianza en mí, has contribuido al fin de una etapa, y en reconocimiento a esa amistad que nos une desde hace muchos años y que valoro como un tesoro, te dedico este espacio que me ha servido para expresar mis pensamientos e ideas más personales, y mis sentimientos más íntimos.
Te deseo lo mejor y por supuesto cuentas con mi ayuda incondicional.

Y a mis lectores, queridos incondicionales, os mando un abrazo.
Se despide con cariño,

EL INGENIERO EN PARO

martes, 2 de junio de 2009

Nº 18999, uy, por uno!!!

Esta mañana he realizado una visita a mi jefe, bueno ex-jefe, pero como fue el primero siempre le otorgaré ese título honorífico.

Me he personado en la nueva dirección de Soluciones Técnicas, la empresa donde ejercí de becario por primera vez.

Allí estaban, Miguel Ángel y Antonio.Los dos como siempre, a sus cosas, con sus quehaceres, y sin becarios claro.El tema de la constrcucción no se porta bien con los autónomos, y bueno, por lo menos están entretenidos con una serie de trabajos que dan para mantener abierta Soluciones técnicas.

Llegué a la hora del café y fuimos a tomarlo en el nuevo bar que tienen fichado.Hasta el local hay un paseo pequeño, más ó menos como cuando estabamos en Francos Rodríguez.Toda mi etapa de becario estuve en la anigua dirección, y no tuve la oportunidad de mudarme a la nueva oficina, eso si ayudé en la mudanza por supuesto.

Y de mil amores porque con lo bien que se portó Miguel Ángel con Nacho y conmigo era lo menos que podíamos hacer, además que no salió solo.

Recuerdo con cariño esa época.Llegué a pasar más horas que en mi casa con la tontería del proyecto, y a veces no fueron buenos ratos, pero con todo se crece en esta vida. Ahí se me ha hecho de noche y si me descuido, de día, jejeje, pero eso ya lo contaré en otra ocasión.

Gracias a esa oportunidad, pude empezar a dar mis primeros pasos como técnico, formándome como calculista y aprendiendo a usar los programas pertinentes para el cálculo de estructuras. Y no solo eso, sino también a involucrarme en el panorama constructivo, por decirlo así.

De haber seguido trabajando allí, la meta era algún día llevar los proyectos de forma independiente, tratando directamente a los clientes, llevando sus cosas e inconvenientes surgidos sobre la marcha, etc.

La verdad es que de haberlo conseguido hubiera estado muy bien, y habría sido algo gratificante, me habría sentido realizado como profesional.Pero no tiene sentido hablar de eso ahora, simplemente recuerdo aquellos días con nostalgía.

Ha sido refrescante ver de nuevo a Miguel Ángel y Antonio.Nos hemos puesto al día de las novedades y les he comunicado una noticia importante, que me va a impedir ir a Soluciones Técnicas con libertad...

Al volver a casa me he encontrado una carta del colegio de ingenieros: Por fin llegó mi carnet de colegiado, que guay!! con mi nombre, mis apellidos, y mi número de colegiado, el 18999, cachis, por uno no soy el 19000 que es más redondo, pero en fin, eso es lo de menos.

El caso es que me ha hecho mucha ilusión verlo, aunque en sí no signifique más que el hecho de haberme colegiado, y nada más, pero no sé, al menos tengo la sensación de que las cosas marchan, hacia adelante.

De hecho, la semana pasada me confirmaron que me habían aceptado en el master a distancia de seguridad y salud en el trabajo, cuya instancia eché en marzo.Cuando había perdido toda esperanza me llamaron y me dijeron que había sido admitido, y hoy he recibido el material.
El master durará hasta noviembre y podré hacerlo desde casa con internet y el material de apoyo. Gracias a esta oportunidad podré realizar unos estudios valorados en varios miles de euros de forma gratuita por estar desempleado, he tenido mucha suerte.

Estoy muy ilusionado por todo esto, porque para el curriculum está genial, porque la seguridad y salud en el trabajo está muy valorada por las empresas actualmente, y estoy convencido de que esto me abrirá muchas puertas en el futuro.

Y cuando ya no podía pedir más, llegó la guinda del pastel, aquello que llevaba esperando desde hace más de cuatro meses, y de qué forma...

lunes, 1 de junio de 2009

UNA VIDA LABORAL COMPLETA (IV PARTE)

Después de los tres trabajos anteriores el listón estaba muy alto... ¿ qué hacer para no repetir en el mismo sitio?

La cosa era ganar dinero, no importaba demasidado el lugar.Me acuerdo que por aquel entonces fue cuando comencé a darle más uso a Infojobs, pero no como ingeniero claro está.Eché a las ofertas que veía, tales como el Corte Inglés y demás. Y mira, me llamaron de ahí.

Estuve haciendo una entrevista en Cardenal Herrera Horia que está donde Cristo perdió el mechero.Después de un video corporativo nos indicaron que rellenarámos un formulario con el puesto deseado.La gama era muy completa: Vendedores, auxiliares, cajeros, carniceros, pescaderos, reponedores, personal pata Bricor, que es el Leroy Merlin del Corte Inglés...

Yo señalé vendedor y creo que nada más.Y bueno, pasó el tiempo y no me llamaron, asi que a otra cosa...

Pensé en volver a mis orígenes de teleoperador, al fin y al cabo, no estaba tan mal, podía hacer un turno intensivo y después dispondría de las tardes completas para recuperar algunas de las asignaturas que me quedaron para septiembre.

El caso es que ese año me hubiera gustado probar suerte como becario, ya que solo me quedaba unas pocas asignaturas para acabar, y podía venirme bien ir conociendo el mundillo de la construcción.Pero aunque eché en algunas empresas, no tuve noticias de ninguna.

Pero mira tú por donde, después de un tiempo sin noticias de nadie, concidieron dos empresas: Una era UNISONO, soluciones de negocio, que me ofrecía un puesto de gestor telefónico en la campaña de Mapfre, y otra, ya no me acuerdo del nombre, era una oficina técnica por Río Rosas que me ofrecía la oportunidad de currar como becario en una obra lineal por la zona de Sanchinarro.

¿Cuál creéis que elegí? ¿O mejor dicho, cuál creéis que tendría que haber elegido?

Pues contra todo pronóstico me quedé con el puesto de teleoperador, y eso que en la oficina me ofrecían creo hasta vehículo propio para desplazarme a la obra, y además podría haber aprendido mucho, entonces ¿qué motivó esta decisión?

Pues sencillo.Comprendí que con las cinco asigntauras que llevaba para septiembre, si quería recuperar unas cuantas, necesitaba tiempo en verano.Si me hubiera metido a la obra, no habría tocado los libros porque me hubiera volcado con ella.Y lo que yo quería primordialmente era acabar la carrera cuanto antes, ya habría tiempo de ejercer cuando saliera ... o eso creía, porque quién me iba a decir la crisis tan tremenda que iba a acontecer cuando estuviera fuera!!

En definitivas cuentas, me decanté por Mapfre, y sabéis? no me arrepiento porque fue una experiencia estupenda que me permitió además, recuperar tres de las cinco que me quedaron, y teniendo en cuenta que solo me preparé esas tres, para mi fue un pleno.

Trabajar para Mapfre me permitió conocer por dentro una compañía aseguradora, y de las más grandes.Aparte de España, tiene sede en México y algún que otro país de Latinoamérica.

La sigla MAPFRE viene a decir "Mutua asociada de propietarios de fincas rusticas de España", más ó menos. Obviamente por el nombre os hacéis una idea de la actividad inicial de dicha mutua, hasta que les dio por expandirse y abarcar más área de negocio.

Dicen que mi carrera es una carrera de seguros, sobre todo si ejerces como proyectista ó jefe de obra.Bueno, pues aquí tenía la oportunidad de entrar en el mundillo y verlo aunque fuera de refilón.

Recibí una formación de tres semanas.En ellas, me empapé de todo el condicionado (librito con los que entraba y lo que no, segñun las pólizas) y aprendí a usar el programa.

Mis funciones eran las de atención al cliente, abrir un expediente cuando comunicaban un parte, y contactar con los diferentes oficios.Por ejemplo, en fin de semana, si alguien necesitaba de un fontanero, yo mismo contactaba con el profesional que estuviera de guardia y concertaba la visita.La verdad es que molaba.

Con la tontería aprendí a ubicar en mi mente las diferentes chapuzas a las que se dedicaban los diferentes oficios.Y bueno, como dato, sabed que Mapfre garantiza al menos cuatro servicios fundamentales las 24 horas del día, como son :Cerrajero, Electricista, Cristalero y fontanero.

Estuve trabajando alrededor de séis meses ahí, porque como ese año no tenía mucha carga con las asignaturas, decidí aguantar y así reponerme del socavón que el carnet de conducir dejó en mi cuenta corriente.

Ese año estuve yendo a la universidad en turno de tarde.Estaba en pie a las seis de la mañana, entraba a las ocho, salía a las dos, comía a las tres en la uni, y a las tres y media estaba en clase, pero a pesar de todo este ajetreo, estaba encantado de la vida, porque estaba entretenido.

Los primeros días se me pasaron volando. Además que el miedo inicial no estaba, ya que había sido anteriormente teleoperador y en una muy buena escuela, ya que en Movistar la clientela se quejaba bastante.

Con la novedad, y el estar abriendo expedientes y demás gestiones, las dos de la tarde llegaban en un santiamén.La única pega era que los descansos los tenía que hacer solo, bueno yo y todos, porque no querían que coincidiéramos muchos ya que si no al estar la gente descocnectadas de los teléfonos la tasa de activación caía en picado, y entonces Mapfre nos tiraba de las orejas.

Había muy buen rollito en la plataforma.Además, entre mis compañeras, había una que se llamaba Liliana, de venezuela, y que casualmente era ingeniera civil, como yo.Me relató su experiencia de cuando estuvo particìpando en la construcción de centros comerciales, la verdad me extrañaba que una persona de sus estudios estuviera haciendo de teleoperadora, pero ya se sabe, el papeleo de convalidar el título es un movidón y además ya no se veía con ganas.

Otra compi se llamaba Toñi, estaba casada y tenía dos hijos pequeños.Era muy maja también, y se sentaba a mi lado.Se tuvo que ir muy pronto por motivos familiares pero me enteré de que volvió, porque mantengo el contacto con la plataforma, que os creéis?Si hasta estuve en la cena de navidad de empresa de este año, y me lo pasé muy bien.

Ahñi fue donde vi a mis dos niñas preferidas:Sara y Moni.

Sara y yo nos conocimos en la formación.En seguida vi que le gustaba Harry Potter y como yo también soy seguidor de la saga, por ahí comenzó nueestra relación.Y nada, poco a poco, hablando y hablando, cogimos una confianza estupenda.La pena es que ella se fue al turno de tarde pero aun asi mantuvimos el contacto y hoy en día somos muy buenos amigos.

Y luego estaba Moni, que mujer, cómo me reía con ella!! Lo curioso del tema fue que añl principio no le caía demasiado bien, según me confesó, porque decía que me veía muy estirado, que no saludaba a nadie, y fue sentarla a mi lado, se puso a hablar conmigo, y al poco cambió de opinión.A la compañera que le había comentado que no le hacía mucho tilín, le dijo que era majísmo, jajajajaja!! ays , mi Moni, que pena le dio cuando me fui, pero que le íbamos a hacer, tenía que seguir mi camino.

Y bueno, en la cena de navidad, cuando le dijeron qe había llegado, estábamos todos en la entrada del local, y ella fue rápidamente a verme, con tal mala suerte que se resbaló y se cayó al suelo, manchándose una de las medias a la altura de la rodilla, con lo guapa que iba, pero qué risa, cada vez que me acuerdo!!!

Y es que no hubiera sido lo mismo sin La Moni.

Pero los coordis también eran gente estupenda, nos ayudaban mucho.José Luis, estuvo en nuestra formación con nosotros, pero después conocimos a Conrado, el super, y a Ana,Azucena, Nuria... todos muy buenos con nosotrso y muy comprensivos.

Al final del día les entrégabamos una lista con los expedientes que habíamos abierto, y nos corregían los fallos que pudiera haber.Desde el primer momento estuvieron muy contentos con mi promoción porque apenas teníamos fallos, y claro, de cara a la productividad mejor que mejor.

Aunque recuerdo que una vez me llevé una bronca... os cuento: Estaba de fin de semana, y recibí un parte de un incendio.Yo expliqué a la familia damnificada que hasta el lunes no podía acudir el perito.Pregunté a mi coordinador, en ese caso José Luis que era el que estaba de guardia, y me confirmó que efectivamente no había nada que hacer.

Pero yo no me quedaba tranquilo pensando que esa familia estaba en la calle por ese fin de semana sin saber si la compañía se iba a hacer cargo de los gastos de alojamiento y demás.El compi que estaba conmigo me dijo que si no me quedaba tanrquilo podía llamar a Mapfre directamente y hablar con una de las que estaban de guardia.

Me atendió una muchacha muy amablemente confirmándome lo mismo, y yo le dije que me quedaba más tranquilo. Parecía que la cosa se había quedado en nada, pero mientras la mujer me hablaba tan amablemente estaba enviando un aviso a central comunicando que uno de los trabajadores no se fiaba de su coordinador.

Al llegar el lunes, los coordis me llamaron y me "regañaron", diciéndome que no se me ocurriera nunca más volver a llamar a Mapfre, que me haga caso del coordinador y fuera.La verdad, tenían razón, pero me dejé guiar por el compi, uqe por otro lado, no sé como lo hice porque a veces estaba más despistao que otra cosa...

Y en cuanto al trato de la gente, bueno, de todo un poco:

El público mayoritario era gente mayor, y dentro de esa gente, los casos más frecuentes eran los de ancianas que llamaban para pedir un persianista porque se le había roto la cuerda de la persiana.Este suceso, sólo esta cubierto en las pólizas de todo riesgo, porque no se considera un siniestro, y claro, estas mujeres no tenían una póliza así, por lo que tenía que decirles que no les cubría y que si querían los servicios del profesional tendrían que abonarlo.

La reacción no se hacía esperar, empezaban diciendo que si éramos un ladrones, unos estafadores, y que no entraba na', que para qué estaban pagando un seguro, etc, etc.De tanto oirlo me sabía el discursito de memoria.

He de decir que a veces las confusiones se creaban a causa de los agentes de las oficinas de Mapfre, porque les explicaban a la clientela las coberturas, y a veces no se correspondía con la realidad, y ya no porque quisieran vender más pólizas, sino porque no se enteraban, y es que la gente inútil abunda.

Eso sí, cuando llamaban para comunicar un parte desde la oficina, te plantaban al cliente y se desentendían.O a lo mejor estaban contigo y en cuanto les decías que eso no tenía cobertura, te pasaban al cliente para que les dieras la mala noticia.Eso era tener cara desde luego porque el cliente se podía cabrear y querían quitarse el marrón,ó eso pensaban.Francamente era peor, porque al fin y al cabo, si se cabreaban, yo no tenía más que colgar el telefóno, pero ellos tenían al cliente en la oficina y a la final, tanto si querían como si no, iban a tener que aguantar el mal humor del asegurado.

A pesar de la bronca que os comenté antes, los coordis estaban contentos con mi trabajo.De hecho, en los seis meses que estuve currando, fue tutor dos veces de novatos que entraban a trabajar.

La primera vez fue a los dos meses, una nueva remesa entraba y tenían que hacer escuchas.Me pusieron a una muchacha que se llamaba Soraya, y ella se ponía a escuchar conmigo a los clientes, cómo les atendía y cómo les hablaba.

La verdad es que las tutorías son muy cansadas, y me ponía de los nervios.Por eso, la segunda vez que me lo propusieron me quedé al margen, y se ofrecieron voluntarios otros compis.Al rato llegó Ana, una de las coordis, diciendo que Conrado, el super, decía que las tutorías las teníamos que hacer Jose,Liliana y servidor. Así que nada, me tocó hacer de nuevo de profesor, se ve que les gustaba como lo hacía, y en fin, no me iba a negar.

Después de esa tutoría dejé el curro.Los exámenes estaban a la vuelta de les esquina y me estaba empezando a agobiar, el trabajo no me dejaba tiempo suficiente.

Así que con pena, presenté mi baja voluntaria.A mis compis les dio mucha pena, y no era para menos porque teníamos muy buen rollo en la plataforma.Además, que pasé los días de nochebuena y nochevieja trabajando con ellos, que me acuerdo de estar tomando algo de picoteo en el descanso y del brindis que hicimos.¿Cómo no me voy a acordar de ellos?

Y para acabar con esta etapa, os voy a regalar la anécdota que más me llamó la atención trabajando en Mapfre.

Un dia recibí una llamada de un cliente que estaba muy disgustado porque una compañera, casualemente de esta plataforma, había dejado de teléfono de contacto el de su padre, y no el de él.Es un error muy común que no voy a explicaros ahora, pero debido a la aplicación a veces si los datos no se actualizan pueden ocurrir estas cosas.

La cuestión es que estaba pendiente de hacer una chapuza en su local, que rezaba como bar-cafetería.El currito llamó para concertar la visita y llamó al padre.

Hasta aquí no hay mayor problema, porque al fin y al cabo, siendo su padre, había confianza no?
Lo que pasaba es que lo de la cafetería era una tapadera, en realidad era un puticlub!!!!! y el padre no sabía nada!!!

El hombre llamó quejándose de una manera tal, que al final lo cogió mi coordi Ana, que fue la que tirando del hilo se enteró del secreto. Qué tal??? Cómo te quedas??

sábado, 30 de mayo de 2009

UNA VIDA LABORAL COMPLETA (III parte)

Verano del 2006. Había terminado el segundo curso de obras públicas.La promesa de que siendo segundo sería más llevadero resultó falsa, cuanto más escalas más peliagudas se ponen las cosas.Fue un año complicado, donde se estudió bastante pero las cosas no fueron mal del todo.

Llegados a julio volvió a surgir el tema del trabajo:Después de estar entre medicinas y teléfonos, no sabía por donde tirar, porque no quería repetir.La verdad es que me gusta cambiar de aires y quería hacer algo distinto a lo anterior.

Por aquel entonces un amigo mio estaba trabajando en el parque temático de San Martín de la Vega, "Parque Warner", y pensándolo bien, podía ser divertido currar en un sitio así, al menos supondría una experiencia.Total, le consulté y llevó mi curriculum.

Como necesitaban gente para la campaña de verano, en un par de días me llamaron.Me preguntaron para que departamento quería trabajar, porque veréis, el parque está dividido en los siguientes departamentos:

-Atracciones: Encargados de la seguridad e higiene de las atracciones mecánicas del parque.
-Restauración: Todo lo relacionado con los diferentes restaurantes y puestos con comida para el público visitante.
-Espéctaculos: Abarca desde los especialistas que se tiran en picado desde una grúa a cientos de metros sobre el suelo, hasta el que se enfunda el disfraz de Piolín para hacerse fotos con los niños.
-Viales: No tan agradable, se encagargan de la limpieza del parque, salvo las atracciones.
-Seguridad: Controlan entradas, accesos, y mantienen el orden.

Aparte está el personal administrativo, que desempeñan sus funciones en unos prefabricados al lado del parque, que fue donde recibí la formación.

Esta formación duro dos semanas.Consistía en una parte teórica y otra práctica. Se me olvidaba deciros que yo me apunté en el departamento de atracciones, al igual que mi amigo.

Bien, pues durante esos catorce días nos instruyeron sobre seguridad y salud en el puesto de trabajo, las operativas en función de las atracciones, alturas mínimas, etc.

Unas veces estábamos en el aula, lo más aburrido.Y otras, salíamos a parque.Entonces íbamos a una atracción y nos explicaban la operativa a seguir paso por paso.Después, todos pasábamos por ella y lo hacíamos para que la instructora nos viera.

Imaginaos lo pesado que se hacía, cuando después de haber visto irse y volver a la montaña rusa diez veces todavía quedaban por hacerlo otras diez personas más.

Recuerdo que cuando me tocó abrochar los chalecos de "Venganza de Enigma", lo que viene siendo básicamente la lanzadera, me puse mazo de nervioso y no atinaba, el enganche se salía, porque la verdad es que esos chalecos en concreto se las traían, y la persona a la que estaba asegurando se quedó mirando con una cara de miedo, como diciendo "en menudas manos estoy".

Ya, una vez tranquilo, todo fue a las mil maravillas, y no volvió a ocurrir nada parecido con las demás atracciones.

Y así, de estas y otras maneras pasaron las dos semanas.Ya estábamos preparados para currar.

Nos dieron unos cuadrantes con los días del mes que nos tocaba currar y los que librábamos, así como el turno, mañana ó tarde, y el total de horas.

El departamento de atracciones se dividía en tres grupos: A,B y C. Cada cual con una serie de atracciones asignadas.A servidor le tocó el C, con las siguientes atracciones: "Coaster express", una montaña rusa de madera a la antigua usanza; "Rápidos ACME", los donuts donde la familia baja empapada por un río, "Hotel embrujado", atracción de ilusión visual donde se mató ese chaval que salió en las noticias hace años, y "ACME Parck", nada aconsejable si no te quieres aburrir porque te toca estar solo todo el día, pues básicamente se trata de un parque de bolas donde van los canis a pasarlo bien.

La verdad es que no estaban mal las atracciones que me habían tocado, en general me gustaba, salvo por ACME Parck, pero gracias a dios, tuve suerte porque no me tocó ni una sola vez.

Bueno, pues todos los días, antes de comenzar la jornada, nos reuníamos en el punto de encuentro.Allí el supervisor pasaba lista de los que estábamos y reúnía a los grupos según cada atracción. Cada una estaba llevada por un equipo integrado por el operador de la atracción, y dos ó tres auxiliares de operador en función de ésta.

Yo era auxiliar obvimente, pero diréis ¿y qué carajos hacía yo? Pues a eso vamos.

La mayoría de las atracciones de Parque Warner tenían la misma esencia: Sólo podían ser accionadas por dos personas a la vez, el operador y el auxiliar. Si ambos no accionaban los mandos a la vez, la atracción no se ponía en marcha, por motivos de seguridad.

La distribución era la siguiente: El operador se colocaba en el puesto de mandos; un auxiliar se ponía en el lado de carga, es decir, por donde se subían los visitantes, y les ayudaba a montar; otro se ponía en el lado de descarga, y les ayudaba a salir, aveces también llevaba el conteo de visitantes con un contador, ya que cada hora se hacía el recuento y se anotaba, para ver las estadísticas de visitantes y en que franjas hay más ó menos.Por último, el tercer auxiliar que falta se ponía en los tornos de las atracciones con el medidor para echar para atrás a los niños que no pudieran subir a la atracción por no llegar a la altura mínima.De esta forma, los padres no se esperaban una cola de hora y media para luego al llegar arriba oir que la criatura no puede subir.

He de decir que la posición que menos me gustaba era esa, porque era la más aburrida y la que acarreaba más marrones, porque cuando estaba en la montaña rusa no había mucho problema, pero cuando se trataba de "Rápidos ACME" la cosa cambiaba bastante. Como era una atracción familiar, la gente quería subir con los niños, entre otras cosas porque no le veían nada de peligroso a la atracción, sin embargo la altura mínima para montar era bastante elevada, y muhcos de los nenes se quedaban fuera.

Eso sí, la gente tenía muchos trucos e intentaba colarlos de todas las maneras posibles: Les ponían gorras con calcetines para que abultaran más, les aupaban, les ponían zancos, les pasaban corriendo para que la medida se desvirtuara, o incluso, cuando venían en tropel, empezaban todos "¡Biennnm que puedes subir!", a ver si así con el chantaje psicológico podían hacer presión. De hecho los pobres niños no se quedaban atrás: Se ponían de cunclillas, ponían cara de pena, una vez incluso parecía que el padre le echara la culpa al niño por no ponerse según él recto, pero vamos a ver, por muy recto que se ponga no va a crecer los dos centímetros que le hacían falta, hombre de dios!!

Mis compañeros decían que tenían muchas movidas con los clientes por esta causa, y que incluso, hasta peleas.Yo en cambio nunca tuve esos problemas, porque como siempre les hablaba educadamente, y les ponía la cara de niño bueno, no había manera de que se cabrearan.Además que les contaba que adentro había otro compañero con otro medidor que no les dejaría subir aunque yo les colara y que mi misión era evitar que chuparan cola, de esta forma parecía hasta que era un héroe, jeje, pero en defintiva esa era la razón de ser de esa posición.

Luego, de propina, les contaba que aunque la atracciñon no fuera muy peligrosa, había una anécdota de un niño que se dió un golpe contra el volante del centro donde se agarran los visitantes mientras montan, con tan mala suerte que se clavó los dientes en el labio inferior.Así reciben su dosis de morbo, y se iban tan contentos. Si es que no hay nada como la piscología.

Pero esa atracción era terrible los sábados por la tarde, cuando había más visitantes.Antes de entrar en ese turno, el supervisor nos decía el número de visitantes en ese momento. Cuando nos decía 12000 ó por el estilo, nos echábamos a temblar porque esa atracción es de la más visitadas del parque y era un descontrol, no dábamos a basto.

Para adelantar las colas, llenaba los donuts por entero, aunque juntara a una familia de cuatro con una pareja desconocida, pero con tanta gente no nos podiamos dar el lujo de lanzar un donut a media carga.Y ahí es donde me ocurrió la peor experiencia de estos trabajos:

Me llega un padre con una niña que claramente no daba la altura, y le dije que no podía subir.El hombre se encabritó diciendo que por la mañana había subido y que no se movía de ahí porque eso era una vergüenza despues de la cola que había esperado y que no había derecho.La operadora me consultó qué pasaba y al decírselo me dijo que na nai, no podía subir. A todo esto, la gente tenía que seguir subiendo porque esa atracción tiene que estar en movimiento continuo, si no se bloquea, asi que mientras el hombre despotricaba, yo iba ayudando a subir a la gente como podía y lanzando los donuts pulsando un botón a la vez que el operador.

Sin embargo el hombre no se movía, y tuvimos que llamar a un supervisor para que viniera.Como se impacientaba, se acercó peligrosamente a la orilla, donde me encontraba yo ayudando a subir a los visitantes, y la niña empezó a llorar.Yo tenía miedo de que la muchacha se cayera al agua y le indiqué al padre que hiciera el favor de alejarse, pero él estaba ensimismado en que tenía razón y en ese momento me amenazó con que si no llegaba de una vez el supervisor me interrumpía la cola y no dejaría que montara nadie.

Por suerte, apareció el supervisor junto con la coordinadora del departamento. Se lo llevaron fuera y ¿a que no adivináis? La esposa del hombre, que estaba esperando fuera, les enseñó una grabación con la cámara de cuando habían montado su marido y su hija por la mañana.Eso quería decir que el hombre decía la verdad, y que el grupo de la mañana se les había colado. Nosotros actuamos como debíamos, pero ese error por parte de los compis del turno de mañana nos costó un mal rato a los de la tarde.

Cambiando de atracción, en el "HOTEL EMBRUJADO", estuve poco pero me lo pase genial. Como la atracción era "de miedo", cuando llegaba con la gente a la biblioteca, pegaba un portazo para encerrarles en la sala y la gente pegaba un brinco.

Esta atracción consiste en una sala donde la gente esta sentada a los extremos.Las paredes giran como donde están los asientos es una góndola que se balancea, da la sensación de estar dando vueltas.Para los de estómago delicado, puede provocar mareos pero no es para tanto.

Recordaréis sin duda la noticia del chaval que murió hace años en el parque, pues fue en esta atracción:No se sabe cómo, pero se zafó de la barrera de seguridad para hacer el tonto, y cuando el engranaje se empezó a mover, se cayó de la góndola y bueno... el resto ya os lo imagináis.

La operadora que estaba ese día por lo visto seguía un tratamiento piscológico, porque le afectó muchísmo.

Desde entonces, para aumentar la seguridad, un axuliar se montaba también en la atracción con un walkie, por si veía algo extraño, ya que el operador, aunque tiene unas cámaras para ver la sala, no disponde de audio.

Y en una de esas, mientras revisaba las barras de seguridad, vi a Lolita!! Anda, mira tú, una famosa, que tal???

Me lo pasé muy bien en esa atracción porque no parabas en todo el día; nos íbamos rotando todo el tiempo, primero cola, luego biblioteca y por último sala, y vuelta a empezar el ciclo.

Y para acabar, la montaña rusa "Coaster Express", donde más tiempo estuve, y con el mismo equipo con el que cogí mucha confianza. Yo llamaba a la atracción cariñosamente Coastere, porque la operadora Teresa, estaba siempre con nosotros y nos trataba muy bien.

Ahí también tuve la oportunidad de ver gente famosa; por ejemplo, yo aseguré el cinturón de seguridad del hijo del socialista Rafael Simancas, ó los hijos de David Beckham!! En esa ocasión que coincidí con ellos, el padre no fue, pero estaba Victoria claro, y bueno, el reguero de babas que iba dejando la muchacha, en fin, que parecía eso los rápidos ACME...

Tengo muy buenos recuerdos de esa montaña rusa. Ahí comencé, que recuerdo que lo primero que hice fue quitar un garffiti, pero bueno, gajes del oficio, peor fue una suplencia en la montaña rusa de Batman que tuve que limpiar un vómito. Si la gente vomitaba de puertas para afuera de la atracción era para Viales, pero si no, era pa nosotros.

Y mi último día en el parque fue también en esta montaña rusa. Y hay una anécdota buenísima que recuerdo con gran cariño:

Esa tarde había tormenta eléctrica, la única causa capaza de paralizar el parque.Además que a la gente no le importa que llueva, hacen cola igualmente.Bueno, pues no se cómo, pero la estación estaba abarrotada de visitantes, y la cola llenaba el patio hasta casi la entrada.

Teresa recibió la orden de paralizar la atracción unos minutos, y me dijo que hiciera el favor de bajar al patio de colas a decirle que había que hacer una pausa.¿¿¿Qué???¡¡Esa gente llevaba esperando ni se sabe y ahora tenía que decirles que no servía de nada!! Me iban a linchar, las quejas no se iban a hacer esperar, pero bueno, le pedí a mi compi Álvaro que estaba mazao, que me acompañara por si acaso...

No baje hasta abajo del todo, me quede en un descansillo a media altura de la escalera, y en plan bando municipal de Julián Muñoz junto a la Pantoja, les expliqué la situación solemnemente a toda esa masa empapada.

Ya estaba preparándome para lo peor cuando un hombre dijo en alto "¡Vamos a darle un aplauso al muchacho que lo ha hecho muy bien y le ha echao un par!" Y ves que la gente empieza a aplaudir y yo como un tomate, dios, vivir ara ver!!!

Grandes momentos hubo en ese parque, de entre mis favoritos, por ejemplo están: Ese cuando los de mantenimiento sacaban un segundo tren para la montaña rusa, y la via descendía y ascendía otra con el tren nuevo; o la del rescate en pleno lift cuando se quedo parada la montaña rusa y mis compis se subieron a patita los mil y pico escalones a rescatar a los visitantes.Yo, mientras abajo, dando explicaciones a los padres, no si, debería haber montado una consulta piscologica...

Eso si, por un tiempo me mantuve apartado de parques y demás porque acabé hasta las narices, aunque le saqué partido a eso de ser trabajador, porque llevé a mis compis de la uni, en dos tandas, aprovechando los descuentos que tenia por ser empleado, y hasta nos hicimos una foto disfrazados de vaqueros, fue la caña!!

miércoles, 27 de mayo de 2009

UNA VIDA LABORAL COMPLETA (II parte)

Bueno, ¿por dónde me quedé? Ah, si, acababa de contaros mis peripecias como boticario, jeje.

Un apunte que me dejé en el tintero:En la parte trasera teníamos un cuarto de baño, si es que se le podía llamar asi porque constaba de lo básico, báter y lavabo.Pero cuando llegué la cisterna estaba un poco trastocada.Y digamos que yo terminé de ... trastocarla.

En una ocasión, al tirar de la cadena no sé como me las apañé pero me quedé con ella en la mano,me explico.Obviamente como podréis imaginar la cisterna estaba destapada y se tiraba del émbolo de plástico que la acciona y vacía. Como estaba tan fastidiado, se partió ó algo así y dejó de funcionar.

Lo peor de todo fue que como la jefa no estaba en agosto nos tuvimos que aguantar unas cuantas semanas sin servicio, y en pleno verano, sin poder ir a otro lado a mear, en fin, que fue una odisea, jeje!

Pero el invierno llegó y yo ingresé en obras públicas, para bien ó para mal, jaja.Pasé un año intenso pero los resultados fueron muy buenos.De las seis asignaturas anuales, aprobé en junio cinco, con lo cual me aseguraba el paso a segundo de carrera, y tenía la posibilidad de recuperar la que me faltaba en septiembre.Se podía decir que había cumplido.

Durante ese año, los dinerillos conseguidos en la farmacia me hicieron mi buen servicio, pero después de tanto libro y tanto material, y vivir, claro está, necesitaba de nuevo una inyección de capital, y teniendo en cuenta que tenía la conciencia tranquila respecto al estudio, me podía permitir el lujo de volver a currar en verano.

Pero ¿de qué? No me apetecía volver a la farmacia, a pesar del buen ambiente.Además, ya no había trabajo para mí porque por aquel entonces habían entrado dos personas nuevas, estudiantes en prácticas, que satisfacían todas las necesidades de la farmacia.

¿Por dónde buscar? ¿Qué hacer? Desde luego un burguer es lo último, eso lo tenía clarísimo, pero la verdad es que no había mucho donde elegir.

La solución me la dieron mis amigos Eva y Luis.Ambos, pareja además, estaban trabajando en ese tiempo en una empresa de telemarketing, en una campaña de la desaparecida AMENA.Estamos hablando del verano de 2005, osea que ha llovido bastante desde entonces.

Al consultarles mi situación, Luis me dijo de llevarle mi curriculum para dárselo a una coordinadora, y probar suerte.Teleoperador, bueno, era un cambio respecto a la farmacia, pero la ventaja era que el cliente no me vería, no le tendría delante, que eso hace mucho, podría estár más distendido.

Al poco tiempo me llamaron y acudí a hacer una entrevista de trabajo. ¡Ay que ver como se diferencian las entrevistas de selección de este tipo de empresas con las de las empresas constructoras, pero este tema se merece una entrada aparte que ya comentaré otro día, porque el tema tiene miga!

Los candidatos estuvimos rellenando unos impresos con nuestros datos personales, y después pasamos por una breve entrevista en grupo.Después nos dijeron de hacer una pequeña prueba para comprobar nuestro talante a la hora de coger el teléfono.

Fue muy divertido.Yo no había hecho nunca algo por el estilo pero estaba acostumbrado a hablar en público y con seguridad en mí mismo.La dinámica era la siguiente:Yo me encontraba en un puesto individual con el teléfono al lado.En la mesa tenía un folio con una información ficticia acerca de un viaje organizado a Barcelona, con los datos pertinentes:Precio, días, estancia, etc.

La formadora me llamaría y se haría pasar por clienta que llama para informase del viaje, y yo tendría que informarle lo mejor que pudiera.Trasncurridos unos minutos prudenciales, para que me diera tiempo a leer y empaparme del tema, la formadora me llamó y descolgue:


-Buenos días, llamaba por el asunto del viaje.Dígame, como va este tema? qué dias serían, el precio y demás...?



Yo comencé, y le relaté de la forma más organizada y educada posible la información que tenía entre manos.Hasta me cambió la voz, ya sabéis, la típica voz nasal de alguien que se ve forzado a fingir una formalidad que para nada es natural, pero el caso era aparentar.Todo iba a las mil maravillas, hasta que la muchacha comenzó a preguntarme cuestiones que NO aparecían en la hoja.

Al principio no sabía por donde tirar, porque al no figurar en la hoja, no me decidía por un camino u otro, hasta que al final tomé una decisión, improvisé y me invité todos los datos que faltaban, con un par.

Terminó la prueba con una falsa despedida, y al poco apareció la entrevistadora diciéndome que me había visto muy bien, y muy suelto para la primera vez.Y la verdad, tuvo que ser así porque acto seguido me ofreció participar en una campaña, cuya plataforma estaba por la zona de Méndez Álvaro, que a mí me venía de perlas porque me pillaba muy cerca de casa con el cercanías renfe.El cliente, MOVISTAR PYMES.

Dispondría de un periodo de formación de dos semanas, en las que básicamente me formarían sobre todo lo relacionado con la campaña, y después, al ruedo.

Efectivamente, fueron dos semanas, pero la formación dejó mucho que desear.En ese periodo tan corto de tiempo nos metieron con calzador un pelotón de información relacionada con las modalidades de contratación de Movistar, formas de cobro, uso del software, y un sinfin de cosas más, total que cuando terminó teníamos un churro en la cabeza que no te podías imaginar, sabíamos mucho de todo y de nada, y eso que tenía el coco entrenado por el año que había pasado en obras públicas...

El último día de formación fue dedicado a escuchas. Los nuevos nos sentamos con un veterano, nos pusimos los cascos y escuchamos en directo cómo se desarrollaban las llamadas.La idea era coger el tranquillo, y si era posible, coger voz, ó teclado, poco a poco.

Y aquí es donde viene la primera de las anécdotas.Me sentaron con un chaval llamado Roberto.El muchacho parecía una persona agradable, que inspiraba confianza, y caray si la cogió, porque a los pocos minutos, en una racha que no entraban llamadas, hablando de todo un poco me salta de repente: "¡Ay, estoy super-emocionado !", yo, por educación le pregunté el motivo, y va y me dice lo siguiente "¡ tú cómo estarías si esta noche fueras a quedar con el hombre de tu vida?"

Guau! De tan poco tiempo que me conocía, apenas un rato, y ya se había abierto de esa manera conmigo, impresionante.Con lo íntimo que es ese tema, contárselo a una persona desconocida de golpe y porrazo, como poco me parecía curioso.Pero lo mejor fue cuando llegó la hora del fin del turno del chaval y nos acercamos a uno de los coordinadores para que me sentara con otro veterano.Estuvieron hablando un momento, en plan broma, porque por lo visto era su último dia curiosamente, hasta que al coordi le dio por decirle "bueno, habrás visto el muchacho tan majo que te he puesto al lado", a lo que el muchacho dijo "sí, ya me he dado cuenta de que tiene una sonrisa muy bonita!".

Perdón????? Eso era un cumplido??? Me parece estupendo que el muchacho quisiera ser agradable pero creo que tampoco hacía falta exagerar, jeje.El caso es que se fue y me sentaron con otra muchacha, que según me contó había estudiado periodismo.

Pero lo que más de interesó de su historia fue que resultó ser la persona que doblaba a la ardilla de Bob Esponja, increible!! Dobladora de dibujos animados, en fin, yo no suelo ver Bob Esponja pero si ella lo decía saldría una ardilla, de hecho me contó que cuando hicieron la película se mosqueó porque no la llamaron y etsuvo al quite de que no apareciera la dichosa ardilla porque si no les habria demandado ya que ese personaje lo tiene adjudicado.Ja, ja, que inetersante!!

La ronda de llamadas fue también muy variada, la verdad es que la gente que llama a estos sitios por regla general no lo hace por gusto, y lo desmostraban a conciencia, desde luego.La verdad no sabía cómo se iba a dar mi primer día, sobre todo teniendo toda la información con alfileres.

Pero el día del estreno llegó. En esta ocasión me decidí por un trabajo en el turno de tarde, así que mi jornada comenzaba a las 15:00 h. Yo y mis nuevas compañeras, las novatas,nos sentamos todos juntos.Digo ellas, porque los pocos chicos que comenzaron el curso de formación, en su mayoria se perdieron por el camino, ya que le surgieron ofertas de trabajo en otros sitios.

La verdad es que echando una mirada general a la plantilla, en su mayoria eran mujeres, y de los pocos hombres que había, existía un notable porcentaje de homosexuales.Supongo que lo de coger llamadas no es algo que vaya mucho con el hombre medio español, yo qué sé, el caso es que fuera como fuese había que ganar unas pelas.

Como os decía, me senté junto con mis compañeras, con las cuales había hecho buenas migas durante la formación.Se reían bastante con mis bromas, y eso facilitó las cosas.Cogí bastante confianza con ellas, la verdad.De hecho, en septiembre nos fuimos al parque de atracciones a pasar el día, y en navidades hicimos e amigo invisble.Pero por unas cosas u otras perdimos el contacto, una verdadera pena.Les deseo lo mejor, estén donde estén,

Pero vamos a mi incursión en el mundo del telemarketing: Me enfundé la diadema con el pinganillo, me puse enfrente del ordena y puse el call-master (el teléfono) en posición recepción de llamadas.Cuando entraba una en línea un pitido me avisaba.

Sería complicado recordar con exactitud el contenido de las llamadas, pero podré haceros una relación bastante aproximada:

El cliente en cuestión, normalmente un empresario, realizaba su consulta.Yo escuchaba atentamente rezando porque fuera una consulta fácil.Cuando no teníamos la información en la memoria, se suponía que teníamos a nuestra disposición una intranet donde estaba todo lo referente a promociones, directrices, etc. Pero la forma de llegar a lo que querías era muy complicada, porque no funcionaba como Google, que metías la palabra clave y zas! el resultado, no, tenías que recorrer una ruta que era muy, muy complicada, y era mi primer día.

Por suerte, los coordinadores estaban pendientes de nosotros, y además pusieron a algunos veteranos de refuerzo para que nos ayudaran.Entonces, cuando me quedaba en blanco, le ponía al cliente la típica música de espera y levantaba el brazo para que alguien viniera y me ayudara.La norma me obligaba a retomar al cliente cada 30 segundos y decirle que hicera el favor de esperar.Al principio vale, pero cuando vas por el minuto y medio pasas de tomarle el pelo al cliente, porque a la tercera vez que le dices "un momento por favor, estoy buscando la información", se queja y se impacienta.

De hecho, recuerdo que un cliente no se quedó conforme con mi respuesta y empezó a decir que iba a denunciar a la compañía, y en su frenesí se olvidó que yo no era el dueño de Movistar, sino un simple operario, y me amenazó con ponerme una querella criminal.Excuse moi? Desde luego cuando la gente se desquicia de esta manera, pierde los nervios y no sabe lo que dice.

Pero poco a poco le fui pillando el tranquillo, y pasé el mes de prueba sin complicaciones.Además, no todos los ratos fueron malos, también hubo muchas risas.Por ejemplo, recuerdo una vez que llamó una mujer mayor, que me decía que si le resolvía su problema, me pondría dos velas para que me casara con una mujer guapa y con dinero.Al oir eso, me empecé a descojonar, pero para que no me oyera, puse el mute.Al oir el vacío, la clienta se pensó que la línea se había cortado, y yo quería retormarla y decirle que seguía ahí, pero la risa no me dejaba, me retorcía en la silla intenado controlarme, y mis compañeras se quedaron mirándome preguntándose qué me pasaba.

Y luego estaban los chismes que circulaban por toda la plataforma, algunos eran míticos:Por ejemplo, la vez que llamó Antonia D'ellate diciendo que ella no debía ningún dinero a Movistar, con una mala leche que no veas.O una tal Maruja, la más famosa, que decía que era amiga de los reyes y que se iba a comer con ellos por ahí, etc, etc.


La verdad es que algunas personas necesitaban compañía, y confundían el 609 con el teléfono de la esperanza.

Pero sin duda, el fenómeno que llamaba la atención en toda la plataforma era Rafita.Este chaval era el típico homosexual amanerado, bolso inlcuido, que confundía espontaneidad y libertad, con impertinencia y provocación.Me parece estupendo que alguien sea como es realmente, pro ante todo educación.

Él pensaba que la gente tenía prejuicios con él por su homosexualidad, pero no era así.Era por su forma de ser, tan estridente, tan impertinente.Recuerdo que cuando él hablaba se le oia en toda la plataforma, los clientes tendrían que acabar sordos.

Pero lo mejor fue cuando coincidimos con él en un curso de reciclaje organizado por la empresa para actualizarnos sobre los contenidos de MOVISTAR, que cambiaban más que una mujer de ropa.

El coordi que nos iba a dar el cursillo empezó diciéndonos que si teniamos alguna duda levantáramos la mano y preguntáramos sin miedo, porque se trataba de que nos enteráramos.

A lo que Rafa no le dejó terminar e interrumpiéndole súbitamente, le preguntó no sé qué cosa.Entonces el coordi se le quedó mirando y le dijo "Sin interrumpir, por favor!" Por lo visto, el comentario no le sentó bien, y como tenía ese complejo de víctima, sintiéndose atacado se defendió como mejor creyó "Um, con que esas tenemos, pues andate con ojo porque entre puta y puta taconazos!!

Se hizo el silencio.Todos los allí presentes currimos un tupido velo a lo que había pasado, pero aquello no había hecho más que empezar.En los días sucesivos, nos regaló comentarios casposos del estilo "me estás vendiendo la moto de Maroto", ó el dato de que estaba suscrito a la revista Elle, o una por el estilo, que al decirlo nos echamos una mirada Gema y yo como diciendo "¿y éste?".Porque no me malinterpretéis, no es que sea yo sea sexista, y separe gustos de hombres y mujeres cada uno por su lado, lo que ocurre es que esa revista no era de mujeres, sino PARA mujeres.¿De qué le sirve a un hombre consejos para soportar mejor aquellos días díficiles del mes? etc, etc.

Ahora que el no va más fue una tarde después del concierto de Juanes en Madrid.Obviamente se enteró toda la plataforma que había ido, y comentándolo en el curso nos relató cómo el muchacho agolpado en las primeras filas se dejaba la voz al grito de "quiero un hijo tuyo!!!!"

Ok, eso rozaba ya el surrealismo.

Pues éstas y otras anécdotas fueron las que se cocieron durante ese segundo verano de curro.

Por lo general, al igual que con el primero, hice un balance postivo.Me quedé con buenos recuerdos, me llevé genial con todo el mundo, de hecho bromeando, decían que cuando me hiciera ingeniero a ver si les ponía una boca de metro en la entrada, porque había que andarse un paseo de 10 minutos sí ó sí desde Atocha, y por ese tramo pegaba el sol una barbaridad en verano.

Y aparte de todo esto, perfeccioné mi dicción, mi forma de hablar en público, imaginaos, casi todo eran empresarios, había que aparentar seguridad y aplomo, y aprendí un poco más acerca del funcionamiento interno de una empresa de telefonía.

Quedaos con este apunte: Para cobrar, no se andan con esperas.El que no paga, se le corta la línea y fuera.No importaba que fuera un cliente de toda la vida, y que realizara el pago.Como se pasara del plazo, tenía que esperar a que le restablecieran la línea, fastidiándole el negocio.

Ahora como se equivoquen ellos y te cobren un dinero de más, ya puedes armarte de paciencia hasta que te lo reembolsen, y esto os lo digo con conocimiento de causa, porque conocí el caso de una mujer a la que le debían una cantidad importante y necesitaba urgentemente que le devolvieran al menos parte de ella.

En fin, lo de siempre, salen perdiendo los débiles.