ESTE CURRO ES UNA RUINA (II parte)

Intuición.Es una de esas cosas que presumen tener las mujeres.Intuición femenina, le llaman.Innumerables casos ilsutran la tan conocida dote, de hecho, son ellas las primeras en hacértelo saber con frases del tipo "hazme caso, me lo dice mi intuición", o cuando se huelen algún cotilleo antes de que salga a la luz y te dicen "créeme, esas cosas las sabemos las mujeres, intuición femenina".

Normalmente la famosa intuición suele funcionar, es más en el 90% de los casos es infalible.Parece que se trata de un don que se transmite de generación en generación por los siglos de los siglos y hasta el final de los tiempos.Sin embargo, yo me pregunto ¿ es verdadera intuición o lo que ocurre es que las mujeres son muy buena observadoras, y por qué no decirlo, a veces incluso manipuladoras?

De siempre ha existido el dicho "detrás de cada hombre hay una gran mujer", y la historia, tanto real como ficción ha estado nutrida de mujeres que han hecho y deshecho a su antojo, asi como ocasionado grandes desastres.Por ejemplo, Salomé pidiendo la cabeza de Juan Bautista, Elena de Troya que ocasionó la gran guerra, en ficción claro, bueno, es que sin ir más lejos, la mítica Eva, que engatusando a Adam le convenció para pecar comiendo del fruto prohibido.

Cuidado, no estoy diciendo que las mujeres sean unas malas pécoras ni algo por el estilo, no soy misógino, jeje, lo que quiero decir con todos estos ejemplos es que a lo mejor la tan afamada intuición femenina se debe a que en realidad las mujeres nos conocen mejor que nosotros mismos, son capaces de interpretar lo que nosotros nos vemos en ocasiones, y son más calculadoras.Por eso siempre se suele decir que los enfrentamientos entre hombres son más nobles, porque van de cara, de frente.En cambio las mujeres maquinan, urden, esconden.

Pero bueno me estoy yendo del tema.Estábamos en la intuición.Y por qué saco yo a colación este asunto, pues porque no hace falta ser mujer para tener una buena intuición y la mía me decía esperando como estaba en el autocar en medio de la sierra la noche del domingo famosa, que debía haberme ido en el autocar de las diez y media, y no haberme quedado una hora más.

Como os decía estaba con las luces apagadas esperando a que nos llamarán.Parecía que se hubieran olvidado de nosotros porque eran cerca de las once y no nos reclamaban.Me estaba empezando a entrar modorra hasta que por fin nos llamaron y bajamos.Nos enfudamos de nuevo el kit camiseta naranja y casco (por lo menos el naranja es mi color favorito y el casco blanco me recuerda a mi carrera), que pereza eso si, después de habérnoslos quitado minutos antes, pero que sabíamos claro.

Volvimos a la entrada de la casa.Delante estaba aparcado un trailer con la maquinaria que iban a usar en las obras.Una mixta, excavadora y pala, y una taladradora.

Las órdenes fueron las siguientes: "Muy bien, vosotros vais a simular que formais parte del equipo que va a remodelar la casa.Quiero que paseis por delante de la cámara (que en el argot se dice "manchar") y que circuleis por todo el medio.Entrar para la casa, salid, dais la vuelta y volvéis, etc.Que parezca que somos aquí ciento y la madre vale? Pues venga!".

Y con estas palabras del director empezamos el desfile.Para arriba, para abajo, para aquí, para allá, esto era el cachondeo padre.Al principio era gracioso, pero cuando ya habías pasado cincuenta mil veces por delante de la cámara llegaba un punto en que el circuito se te quedaba pequeño.

A todo esto, el director hablando "a ver, se me están formando calvas en ese lado", luego se dirigía al presentador y a la jefa de la obra "haz como que tenéis un problema, un inconveniente, etc", (lo que os decía de la ficción de la tele, muchas fanfarrias y después no hay chicha), y así estuvimos toda la hora.Lo mejor de todo fue ver como el maquinista bajaba las máquinas del trailer, conduciéndolas él mismo por la rampa de descarga hasta el seguro suelo.

El presentador que por lo visto tenía buen rollo con todo el equipo le decía campeón por la hazaña que había realizado.Tenía su mérito desde luego, pero se ve que no pisa muchas obras este hombre, y ésta era un poco de mentirijillas, asi que no sé yo ...

Por fin vino la cena prometida, bueno, cena.Está claro que no me esperaba un buffet, pero desde luego no era como para tirar cochetes: Kit básico de bocata jamón, lata coca-cola light, que detalle, y una manzana.Y pa casita, habíamos terminado.

A estas alturas eran ya las doce de la noche, bueno, entre unas cosas y otras las doce y media casi, porque veréis, ala vuelta tuvimos un problema:El conductor se equivocó y quiso dar marcha atrás pero como las calles eran muy estrechas un coche aparcado no le dejaba virar, y tuvo que subirse toda una cuesta en retroceso.Lo que pasó es que tuvo que bajarse medio autocar para que el motor pudiera hacer la proeza.

Y ya sí, directos para Madrid.Esta vez iba sentado junnto a mi hermano, y cuando el chaval que estuvo con él todo el tiempo me vio sentado con él pareció que no le hizo mucha gracia, pero qué quieres? es mi hermano, también tengo derecho no te digo!

Llegamos a la una y media pasadas.Nos dejaron en Cibeles, ni modo, como dicen los mexicanos, había que pillar el buho, porque a esas horas justo había cerrado el metro.Menos mal que el nuestro salía sobre menos cuarto y no esperamos mucho en la calle.Así concluyó nuestra odisea de la sierra.

Pasaron los días, y a la semana siguiente ofrecían volver el domingo a recibir a la familia para que viera la nueva y maravillosa casa.A mí me pillaba fuera de Madrid ese día asi que ni me lo planteé, aunque decían que ese día eran menos horas y pagaban lo mismo.Mi hermano se lo pensó pero al final no fue.

Yo, en aquel entonces solo pensaba en la semana santa.Faltaba una semana, y tenía puesto mi interés en una escpada que iba a hacer con mis amigos.No pensaba ni en curro ni en cursillos, quería planificar esos días bien, si me necesitaba ya me llamarían, sabían dónde encontrarme.Y me encontraron.

La mañana del lunes sonó mi móvil y reconocí el número: "¿Alberto?, hola soy Nuria, te llamo de la agencia, era para ver si podías hacer de samur en HOSPITAL CENTRAL el miércoles?"

"Vaya, así que se han acordado de que existo, y yo que pensaba que no volería a tener contacto de esta gente", pero bueno, tenía que reaccionar y contestar: "Eeh, vale", dije. "Bien, pues mañana te llamo con la hora y el lugar, hasta luego".

Anda, mira por dónde volvía a participar como figurante, y en Hospital Central, la segunda vez.Primero fue de operario y ahora de samur.Cierto es que dije que no me llamaba y que no sabía si volvería pero ante la falta de curro, siempre viene bien sacar unas pelillas, total si tiempo es lo que me sobra.

Lo que no sabía era el cambio de planes que me tenía reservado el destino, porque al final no hice de samur, sino de...